lunes, 26 de abril de 2010

Ser feliz es fácil, lo difícil es conformarse con serlo.

domingo, 11 de abril de 2010

Qué difícil es a veces verlo todo tan fácil

Qué difícil es a veces verlo todo tan fácil. Pensar que tienes la solución a todos los males. Ponerte en el lugar del otro intentando comprender su situación. Obligarle a luchar, darle consejos la mayoría de las veces bonitos pero poco prácticos.
Aliviar nuestro dolor haciéndonos más daño. Intentamos ayudar pero se nos olvida lo más importante: que no somos nosotros. Cada uno tiene una personalidad, un instinto, un corazón, una mente y una conducta. Si elegimos para ellos lo que nosotros haríamos podemos meter la pata hasta un fondo muy profundo porque es posible que no coincida para nada con esa persona. Pero aún así lo hacemos, porque no sabemos ayudar de otra forma.
La verdadera empatía en realidad es imposible. Podemos ponernos en el lugar del otro pero no podemos sentir como el otro. Es fácil imaginar que una situación te pasa a ti pero es difícil, diría imposible imaginar como te sentirías en esa situación si fueras esa persona porque ¡no eres esa persona! Y cada uno es un mundo, con sus emociones y sus experiencias, por eso no podemos aconsejar nunca de manera acertada a ciencia cierta en una vida que no es la nuestra.
Que pena… duele darte cuenta que siempre que intentamos ayudar, es posible que no siempre lo estemos haciendo.

viernes, 9 de abril de 2010

domingo, 4 de abril de 2010

Hospitales

Creo que si los hospitales fuesen de colores la gente se curaría más rápido. Lo monocromo deprime, estanca, ralentiza. Dicen que el blanco purifica y tranquiliza pero quieras que no su luz te acaba atontando. No digo que se conviertan en circos o en fachadas de Gaudí pero algo... líneas, dibujos, pinceladas de alegría que te recuerden que estas vivo, además de enfermo. Con que las batas y las sábanas sean blancas es suficiente, entiendo que los colores son más difíciles de limpiar.
El entorno afecta más de lo que la gente piensa. Los días soleados las personas sonríen más que los lluviosos aunque sus problemas sean los mismos. Los lugares aburridos tienden a ser blancos, grises, negros... los divertidos rojos, azules, amarillos ¿Por qué? ¿Nadie se ha planteado nunca por qué no hay cuadros ni esculturas en los hospitales? Dudo que un toque de belleza pueda ofenderle a alguien, incluso aunque te estes muriendo. Al contrario, creo que otorgaría un poco de humanidad al momento. Los hospitales son tristes... pero no tendrían porque ser tan feos.